domingo, 24 de junio de 2012

¿Y esa vaina con qué se come?

"Sucre atardecer", Juan Carlos Díaz Méndez
En la mañana del sábado me desplazaba con mi hijo por las calles de un barrio cuya reputación es dudosa, el San Jorge Central; entre chiste y chanza resultamos hablando de la naturaleza violenta del ser humano, de la inclemente ola de violencia que ha forjado la historia de este país y, como en la divagación está el placer, resultamos hablando de migraciones, mutaciones y fusiones de la música. Colombia debe su riqueza musical no sólo a la inmensa variedad de ritmos y géneros que se dan en el territorio nacional, sino que debido a las migraciones como la colonización antioqueña y los desplazamientos forzados como a los que fue sometida la población sabanera de Sucre a causa de la Guerra de los Mil Días, las músicas se han trasladado, mezclado, nacido y muerto.

domingo, 17 de junio de 2012

Caicedo y Nereo, juntos en la capital

Acuarela del barrio La Candelaria de Bogotá,
por Tr3s Más

Recorrer el barrio de La Candelaria en esta época del año es especialmente agradable; verano en Bogotá no da tanto como para una canción como la recordada “Un verano en Nueva York” de la Universidad de la Salsa, El Gran Combo de Puerto Rico, pero sí para llenar de adjetivos y descripciones estas páginas. Los techos de teja de barro resplandecen con la luz del astro rey cayendo en perpendiculares, los edificios refulgen desde el oriente, enmarcados en el azul intensísimo de los cerros. Hasta hace unos años la capital era una ciudad gris, opaca, llena de edificios vetustos y, en términos generales, una ciudad poco amable. Pero de un tiempo para acá se ha convertido en un destino turístico obligado.

domingo, 3 de junio de 2012

Amanecí otra vez…

"Trapiche", Ponpeyo Delgado Torres

No hay manera de saber, comprender o imaginar siquiera lo que pasa por la mente de otra persona. No es posible explicarse por qué un día un individuo se levanta sicótico y la emprende contra el mundo. Dicho de otra manera, no se puede saber por qué la gente se levanta con el mico al hombro. Pero es que la situación actual no da para otra cosa. Desde el vecino buena onda, farrero y desconsiderado que rumbea hasta las 3:00 a.m. con puro hardcore y salsa dura a todo volumen, hasta el personaje que, aparte de robarse el erario, se indigna porque algún ente de control le va a abrir investigación por lo que él considera una ligereza de su parte. Así a quién no se le salta el taco de vez en cuando.